Cuando algunos bebés se alimentan les suele entrar aire al estómago, por ello se producen algunos malestares y los eructos los ayudan a eliminar el aire acumulado.
Es común que cuando un bebé esté siendo alimentado, ya sea con el pecho o con la mamadera le entre aire acumulándose en su estomaguito. Si ves que tu bebé ya no quiere seguir comiendo, intenta hacerlo eructar, ya que esto aliviará su pancita y le abrirá más espacio para que siga tomando su lechita. El eructar también es beneficioso para los bebés que sufren de reflujo, ya que su estómago no se sentirá tan pesado e hinchado.
Hay que saber que no todos los bebés son igual, por lo tanto habrán algunos que no eructen después de sus tomas, esto tal vez quiera decir que no les ha entrado mucho aire.
¿Cual es la manera correcta de hacer eructar a un bebé?
- Apoye al bebé contra su pecho. La barbilla del bebé se debe apoyar en su hombro. Con un mano sostenga su cabecita y con la otra mano vaya dandole palmaditas suaves en la espalda.
- Sentar al bebé en sus piernas. Siente al bebé e incline su cuerpito un poco hacia delante. Con la palma de la mano sujete la barbilla del pequeño y utilice la otra mano para darle leve palmaditas o frotarle la espaldita.
- Colocar al bebé boca abajo sobre sus piernas. Sostenga la cabeza del bebé para que esta queda más alta que su pecho. Dele palmaditas en la espalda.
Para que pueda usar cualquiera de las tres técnicas mencionadas te dejamos un video para que puedas visualizarlas mejor y ponerlas en práctica.
Si el bebé parece inquieto mientras lo alimenta, deje temporalmente de alimentarlo, hágalo eructar y vuelva a alimentarlo de nuevo.